Tabla conductas positivas de SoniaMaríaLapaz1
Si bien las conductas elegidas están presentes en mayor o menor medida en el resto del alumnado, en el alumno con autismo son muy deficitarias o nulas.
Si bien las conductas elegidas están presentes en mayor o menor medida en el resto del alumnado, en el alumno con autismo son muy deficitarias o nulas.
Expongo el panel de registro en la pared, junto a su mesa,
para que lo tenga presente a lo largo de la jornada. Como cada mañana, al
entrar a clase, el alumno explora el aula en busca de nuevos elementos y, al
encontrar el panel, se queda mirándolo. Aprovecho para explicarle cuáles son
las conductas que se espera que haga y la consecuencia que tendrá su
realización (recibirá un “ok” y cuando consiga tres “ok” podrá jugar en el
ordenador).
Para mostrarle cómo conseguir un “ok” he forzado una
situación en la que ha tenido que pedirme su cuaderno por favor. Acto seguido
he recortado su “ok” y lo he pegado en el lugar correspondiente, después de
celebrárselo (refuerzo verbal).
Al principio está consiguiendo sus “ok” con ayuda,
instándole a que realice la conducta deseada. Para ello también me ayudo de los compañeros/a, en el sentido de que le sirven de modelo de buena conducta y por ello son elogiados. No obstsante, la pretensión es ir
reduciendo la ayuda para que llegue a instaurarse de manera natural. Al final
de la mañana, cuando debe escribir en su cuaderno de aprendizaje, observamos
los “ok” conseguidos y él debe decir el porqué los ha conseguido, para tomar
conciencia de la conducta deseada. Además, deberá expresar si se siente
contento, alegre o feliz.
El alumno disfruta mucho con los halagos y el reconocimiento
de sus actos, por lo que el sistema de recibir “ok” es gratificante en sí mismo.